Medalla de la Virgen del Rosario de los Pastores y Escudo de la Hermandad

Una muestra de respeto y orgullo 

     La andadura de cada nueva Junta de la Virgen, se inicia con una Misa de Imposición de Medallas a los nuevos integrantes, junto con el Escudo de la Hermandad. Ciertamente, esta es una emotiva ceremonia tanto para los nuevos miembros de la Junta como para todos los que formamos parte de la Hermandad desde que nuestros padres decidieran pedir la bendición a Nuestra Madre, pasándonos por el Manto de la Virgen del Rosario de Pastores.

          En cada acto de culto y, especialmente, los días de la Fiesta, cuando la Virgen pasea por las calles de su pueblo, de nuestro pueblo, todos deberíamos enorgullecemos llevando esta hermosa seña de identidad que nos hermana y nos une a todos, junto con el escudo de la Hermandad que además de reflejar su historia, también muestra la advocación de la Virgen. 
Medalla y Escudo de la Hermandad
Ponerse la medalla de la Hermandad 
significa sobre todo, que
llevamos a la Virgen en el corazón
          Es hermoso ver, cuando se impone la medalla a un nuevo hermano, cómo hay otro hermano a su lado dispuesto a guiarlo y acompañarlo. Creo que este gesto no se debe quedar reducido a un simple momento emotivo y de compañerismo, sino que ha de permanecer vivo para siempre. 
         En definitiva, llevar la Medalla acompañando a la Virgen, ha de suponer un enorme orgullo para todos los huerteños. Especialmente para aquellos que algún día formaron parte de la Junta. La Virgen del Rosario de los Pastores nos conceda a todos vivir y disfrutar lo que significa llevar junto a nuestro corazón esa Medalla.
          Hagámoslo todos con el máximo respeto y orgullo, cada vez que acompañemos a Nuestra Madre en cada uno de los actos organizados en su Honor.