Procesión por Toledo 1954

La Virgen del Rosario de Pastores en Toledo



Crónica del Año Mariano en la Archidiócesis de Toledo, Primada de España,
con motivo del Centenario de la Definición del Dogma de la Inmaculada.
Año 1954

Homenaje de la Archidiócesis Primada a María Inmaculada



El día 31 de Octubre era esperado por todos los toledanos para la celebración de un homenaje sin precedentes en la ciudad de Toledo.

Al clarear el alba los Rosarios de la Aurora de cada una de las Parroquias de la Ciudad, dejaron oír sus melodías marianas y recordaron a todos los fieles que no era tiempo de dormir cuando iban a volcarse en honor de la Inmaculada.


La Peregrinación Mariana más gigantesca de la historia toledana


Todas las carreteras, todos los caminos, hasta los raíles del tren eran venas y ríos caudalosos de peregrinos, que confluían a Toledo. La víspera o muy de noche todavía salían los coches de los Arciprestazgos más distantes: Elche de la Sierra (360 km), Alcaráz (300 km), Tamajón (180 km), Guadalajara, Brihuega, Pastrana, y no digamos de los Arciprestazgos de la Provincia toledana, porque ello fue migrar todo el pueblo en pos de su Patrona adorada. Fuensalida acompañó a la Santísima Virgen de la Soledad trayéndola a hombros y a pie procesionalmente desde el pueblo, escoltada de 700 peregrinos, con otros 1300 más que se trasladaron en coches, uniéndose a su imagen en Toledo.
También Lillo, distante 61 km de la Ciudad Imperial, trajo procesionalmente a pie a Nuestra Señora de Fátima. Los talaveranos trasladaron, andando dos día, una imagen copia, en tamaño reducido, de la Reina del Prado: los jóvenes la traían a hombros y se relevaban en determinados puntos estratégicos con otros peregrinos que hacía hasta allí el viaje en el tren o en coches. De Portillo 60 fieles trajeron a hombros su Patrona. La inmensa mayoría de los pueblos habilitaron autocares, camiones con el correspondiente permiso gubernamental solicitado por la Comisión organizadora, tractores, coches particulares, carros, motos....   Un tren especial condujo a los fieles de la región de Villacañas, y otro a los de Noblejas y Ocaña. La Comisión organizadora, que había previsto esta aglomeración dispuso que los fieles dejaran los coches en el Miradero y a pie llevaran sus imágenes a la Catedral. A las diez de la mañana el aparcamiento se había llenado y no fue posible que ningún coche más subiera. El amplísimo patio del Hospital de Tavera estaba abarrotado de imágenes y peregrinos a las once de la mañana, de forma que no era posible dar un paso por la Vega y por las calles colindantes.

La elocuencia de los números


Todo lo precedente, lejos de ser una exageración queda muy por debajo de la realidad. Confluyeron en aquella mañana unos 40.000 peregrinos de los pueblos de la Archidiócesis; 24 bandas de música, 143 imágenes forasteras, más las 21 imágenes de la Capital, 800 estandartes, 28 carrozas.... Nadie puede imaginarse, sin haberlo visto, la vistosidad, la alegría de aquella mañana llena de luz y de amor. la Romería de toda la Archidiócesis se había apoderado de la Ciudad convirtiéndola toda en un Santuario Mariano. Y con razón, pues la Imperial Ciudad guarda como un tesoro aquella piedra donde la Purísima Virgen puso sus pies virginales cuando descendió del cielo para visitar al glorioso Ildefonso de Toledo, "Arzobispo de la Archidiócesis Primada".  Y la alegría, el color, los cánticos de las muchedumbres, de los jóvenes, de los niños, traían olor de romero y aire purísimo de campos otoñales.

la figura del Excmo. Cardenal Primado atravesando la plaza desde su palacio Arzobispal, revestido de capa magna e impartiendo la bendición al numerosos público. El Cabildo Catedralicio, con sus trajes relucientes de gala ha salido a recibir al Cardenal Pla y Daniel a una lateral Puerta de los Reyes. La Catedral rebosa de los peregrinos más madrugadores y de fieles toledanos. Son las diez de la mañana. Las autoridades están en sus sitiales: El Excmo. Sr. Gobernador Civil de Toledo, D. Andrés Marín y el de Guadalajara D. Miguel Moscardó, con su séquito de jerarquías. El Excmo. Ayuntamiento de Toledo bajo mazas, la Diputación Provincial de Toledo con su Presidente y el Alcalde de Guadalajara, ocuparon el espacioso presbiterio de la Catedral Primada, entre las gradas y las verjas. La Inmaculada del Alcázar fue colocada en el Altar Mayor, sirviéndole de fondo el maravilloso retablo de Cisneros.

El Emmo. Sr. Cardenal oficial de Pontifical con todo el esplendor de las galas de la Catedral Primada. Le asisten las dignidades mitradas. El coro catedralicio, reforzado por el Seminario, canta la Misa en honor de la Inmaculada.  E. M. I. Sr. D. Filiberto Diez Pardo, Canónigo Magistral, ocupa la Sagrada Cátedra. Así la Diócesis Primada de España se asociaba a Su Santidad el Papa Pio XII, que al día siguiente iba a proclamar en Roma la Realeza de María.

Espectacular Procesión Mariana



"TOLEDO SALUDA A LAS IMÁGENES PEREGRINAS", decían las grandes pancartas puestas en las Puertas de Bisagra, Alcántara y en el Miradero. Pero más bien fueron las mismas Imágenes peregrinas quienes dieron calurosa emoción a su místico encuentro con la Sede Primada; su entrada en la Ciudad Imperial fue verdaderamente triunfal.

El número de peregrinos es tan grande que no puede darse un paso por las calles de Toledo. Esta ciudad, famosa por sus tortuosas callejuelas, fácilmente abarrotadas de publico en las horas de más movimiento de sus días cotidianos, es invadida por más de 40.000 personas con monumentales carrozas ataviadas con flores y cortejos de atuendos multicolores y seculares;bandas de música, rondallas.... Y sobre esta muchedumbre de peregrinos póngase la totalidad del pueblo toledano, que abandona sus casas para vivir un día en la calle, o siguiente cariñosamente la interminable hilera de novedades, sumándose con emoción al cortejo de la Patrona de su pueblo. Aquella Virgencita que miraron sus ojos puros de niños, la que llenaba la devoción de sus padres, la que desde que se vino a la Ciudad para ganarse el sustento no había vuelto a ver.....


Los romeros de la primera hora de la mañana pudieron llegar fácilmente a la Catedral por el itinerario prefijado:  Nuñez de Arce, Plaza de San Nicolás, Alfileritos, San Vicente, Cardenal Lorenzana, Navarro Ledesma, Nuncio Viejo, Arco de Palacio, Plaza del Generalísimo (hoy del ayuntamiento) y Puerta Llana. Pero lo espectacular fue la improvisada Procesión de imágenes peregrinas formada por este itinerario desde las once de la mañana, hasta las tres de la tarde. Sin ninguna interrupción de la fila de Imágenes y pueblos que ocupaban todo el recorrido desde la Puerta Llana hasta la Plaza de Toros. Las Imágenes que a las doce de la mañana estaban aún en Tavera, tardaron en llegar a la Catedral tres horas y media.

La mañana era un ascua de luz primaveral. la alegría de piedad filial era lo que decían los rostros de peregrinos. El asombro se reflejaba en la cara de los toledanos espectantes.

Llegadas las Imágenes a la Catedral, una comisión, dirigida por el M. I. Sr. D. Luis Casañas Guash, Canónigo Perfecto de Ceremonias de la S.I.C.P. y alma rectora de esta Procesión sin precedentes, recibía la Imagen y la conducía por las naves de la Catedral al lugar que se le había designado previamente, teniendo en cuenta el orden de salida. Los peregrinos estaban al corriente de toda la organización por oportunas circulares enviadas a sus Parroquias.y por unas instrucciones y planos que se les había facilitado. Los planos estaban profusamente repartidos por las paredes de las calles de más tráfico para que todos pudieran conocerlos. Unos señalaban en el plano de la Catedral la situación precisa de las Imágenes, otros señalaban en las calles que rodean la Catedral el sitio reservado para los diversos Arciprestazgos y donde habían de esperar a su respectiva Imagen para unirse a su comitiva en la Procesión de la tarde; finalmente un tercer plano reproducía el Paseo de Merchán, lugar de la concentración mariana, indicando el itinerario de acceso, el sitio reservado para las Imágenera, para el publico, para las autoridades y representaciones y los emplazamientos de los servicios sanitarios, por fortuna innecesarios. Toda esta organización y propaganda, aumentada por los potentes altavoces de la Catedral, impidieron que la Procesión y la concentración mariana, se hicieran irrealizables por exceso de personal. Si se tiene en cuenta el público concentrado en las estrechas calles de Toledo, podremos calcularle un número de 80.000 personas, entre forasteros y los de Toledo. El aparente desorden que reinó todo el día en Toledo, es a nuestro juicio un éxito de la Comisión organizadora, que se vió superada en sus previsiones más optimistas por un pueblo amante de la Santísima Virgen María, hasta el delirio. Prueba evidente del perfecto orden de la mañana fue que pudiera salir la primera Imagen de la Procesión vespertina a la hora prefijada, las cuatro de la tarde.

A la perfecta organización, y sobre todo, a la protección maternal de Nuestra Señora, se debió sin duda el que no hubiera que lamentar ninguna desgracia personal en la concentración de Toledo y en los viajes de ida y vuelta.

La jornada fue dura para los cuerpos, cansados y polvorientos de los largos caminos de la Archidiócesis, pero la alegría del alma se enseñoreó de todos los peregrinos haciéndoles insensibles al cansancio y embebiendo sus espíritus en tal manera que aquel día les pareció un pequeño paréntesis de la prosa de la vida, donde pudieron gozar de un cielo anticipado en el triunfo de María.


Apoteósica Procesión de la tarde




















El itinerario de la procesión estaba engalanado con un gusto extraordinario, índice del fervor de aquellas fechas, puesto que los vecinos espontáneamente habían dispuesto hacer de sus calles un templo votivo a la Santísima Virgen María en aquella memorable tarde. Ya fue notable el adorno callejero en las visitas domiciliarias de la Santísima Virgen por Parroquias durante todo el mes de octubre, pero para que este día se lucieron las mejores galas en la via pública, emulando las famosas fiestas del Corpus. La calle de Hombre de Palo, agitaba miles de banderitas con los colores de la Inmaculada, y habían entretejido con guirnaldas sus pareces, y con arcos revestidos de pino y tomillo, iluminados con tubos fluorescentes, rindiendo honor a las Imágenes procesionales. La calle Comercio no le iba en zaga, preciosos mantones de Manila, arcos, apretadas hileras de banderitas, luces y anagramas luminosos, alusivos a la Santísima Virgen. Zocodover también habíase revestido de sus mejores galas en honra a la Inmaculada. las colgaduras del Gobierno Civil con los colores nacionales y con los tapices heráldicos, las banderas y gallardetes, que con abundancia cubrían materialmente el cielo de la espaciosa plaza toledana; todo era grande y hermoso. Se distinguieron también en el ornato callejero los vecinos de Santiago del Arrabal, domiciliados en el paso de la procesión con guirnaldas y bombillas de colores transformando su barriada en un bello templo mariano. También estaban iluminadas las almenas de la Puerta del Sol, la Puerta de Bisagra, la fachada de la Ermita de la Estrella y la torre del Templo Parroquial de Santiago del Arrabal, desde la que pendían unas largas colgaduras con los colores de la Inmaculada. las banderitas pequeñas lo habían inundado todo, hasta el paseo de Merchán (la Vega), donde había de celebrarse el acto grandioso de clausura de la Gran Semana mariana, cubierto materialmente de aleteos de banderitas y gallardetes.


Esplendor en la gigantesca comitiva


Al sonido de las cuatro campanadas del reloj catedralicio, comenzó a ponerse en marcha el cortejo procesional. Abría marcha la Guardia Civil montada, con sus relucientes sables y su lujoso traje de gala, y los timbaleros del Ayuntamiento, también a caballo. Después la primera Imagen procesional fue Nuestra Señora de los Dados, Patrona de Maqueda, cortejada por los caballeros moros y cristianos que evocaban la piadosa leyenda. Después seguían las restantes Imágenes por orden alfabético de Arciprestazgos; y en éstos los pueblos, por orden alfabético también, dejando el último lugar para el Arcipreste. El último Arziprestazgo era el de Toledo, cerrándose el cortejo con 20 Imágenes de las Parroquias de Toledo y la celestial Patrona de Toledo, Nuestra Señora del Sagrario.
Listados de Imágenes procesionales, por orden de Arciprestazgos:

PARROQUIAS TITULO Nº PEREGRINOS
Toledo - Santa Iglesia Catedral Sagrario
Toledo - Santo Tomé Esperanza
Toledo - Santo Tomé Bastida
Toledo - Santo Tomé Cabeza
Toledo - Santo Tomé Monte Sión
Toledo - Santo Tomé (San Salvador) Rosa
Toledo - Santa Leocadia Salud
Toledo - Santa Leocadia (San Román) Salud
Toledo - San Justo Consuelo
Toledo - San Justo (San Andrés) Paz
Toledo - San Justo Valle
Toledo - San Nicolás Fátima
Toledo - Santiago (Azucaica) Purificación
Toledo - Santiago (San Antón) Purificación
Toledo - Santiago Estrella
Toledo - San Pedro Carmen
Toledo - Santa Bárbara Guía
Toledo - asilo Provincial Milagrosa
Toledo - Hijas de María (Jesuitas) Purísima
Toledo - P.P. Carmelitas Carmen
Toledo - Fábrica N. de Armas Amparo
Almonacid de Toledo De la Oliva 500
Argés Rosario 150
Ajofrín Gracia 200
Bargas Inmaculada 2.200
Burguillos Rosario 98
Cobisa Angustias 115
Cuerva Remedios 495
Chueca Carmen  50
Gálvez Dolores 800
Guadamur Natividad 650
Layos Rosario 120
Magán Inmaculada 350
Mocejón Carmen  500
Menasalbas Salud 306
Mazarambroz Sagrario 150
Nambroca Purificación 300
Navahermosa Rosario 600
Noéz Santa María Pequines 100
Casabuenas Purísima 30
Totanés Purísima 85
Olías del Rey Rosario 500
Orgáz Socorro 600
Polán Salud 800
Pulgar Pilar 225
Sonseca Remedios 1.200
San Martín de Montalbán Inmaculada 60
San Pablo de los Montes Gracia 250
Ventas con Peña Aguilera Aguila 424
Villaminaya Angustias 500
Alcaráz Cortes 55
Villarrobledo Caridad 200
Beihuega Peña 60
Archilla Asunción 10
Romancos Rosario 21
Horche Inmaculada 50
Castañar de Ibor Rosario 45
Consuegra Blanca 1.300
El Romeral Fátima 100
Madridejos Carmen 400
Manzaneque Asunción 78
Mascaraque Gracia 750
Mora Antigua 800
Quero Nieves 125
Tembleque Soledad 240
Turleque Rosario 150
Urda Inmaculada 200
Villacañas Inmaculada 700
Villa de Don Fadrique Inmaculada 65
Villafranca Inmaculada 300
Villanueva de Bogas Inmaculada 100
Yébenes Finibusterre 350
Ocaña Remedios 450
Cabañas de Yepes Socorro 200
Ciruelos Anunciación 50
Dosbarrios Rosario del Campo 407
Huerta de Valdecarábanos Rosario de Pastores 600
Lillo Fátima 85
Noblejas Rosario 350
Villamuelas Inmaculada 50
Villatobas Rosario 400
Villarrubia de Santiago Castellar 550
Villasequilla Inmaculada 200
Pastrana Carmen 100
Puente del Arzobispo Bienvenida (estandarte de) 105
Aldeanueva de Barbarrolla Espino 65
Moheda de la Jara Prado 38
Robledo del Mazo Piedraescrita 28
Alameda de la Sagra Asunción 300
Añover de Tajo Vega 300
Boróx Salud 600
Cabañas de la Sagra Rosario 200
Cobeja Carmen 100
Casarrubios del Monte Gracia y Salud (2) 517
Chozas de Canales Dolores 525
Esquivias Buena Leche 200
Illescas Caridad 1.500
Méntrida Natividad 450
Numancia de la Sagra Carmen 350
Pantoja Inmaculada 100
Recas oliva 800
Seseña Inmaculada 700
Torre de Esteban Hambrán Misericordia 200
Valmojado Misericordia 325
Ventas de Retamosa Carmen 80
Villaluenga de la Sagra Mercedes 400
Villaseca de la Sagra Angustias 1.000
Yuncler Carmen 425
Yunclillos Salud 675
Yuncos Consuelo 500
Torrijos Corazón de María 2.100
Albarreal de Tajo Corazón de María 90
Alcabón Aurora 156
Almorox Inmaculada 200
Arcicóllar Visitación 200
Burujón Inmaculada 70
Camarena Caridad 700
Camarenilla Rosario 160
Carmena Pilar 106
Carpio de Tajo Ronda 700
Carriches Encina 180
Escalona Inmaculada 375
Paredes de Escalona 40
Escalonilla Pilar 200
Fuensalida Soledad 2.990
Gerindote Inmaculada 205
Huecas Del Gozo 150
Hormigos Higuera 50
La Mata Dolores 300
Maqueda Dados 200
Novés Mongía 200
Portillo Paz 500
Puebla de Montalbán Soledad 400
Quismondo Asunción 200
Rielves Inmaculada 125
Santa Cruz de Retamar Paz 300
Santa Olalla Piedad 50
Val de Santo Domingo Inmaculada 150
Val de Santo Domingo (Caudilla) Inmaculada 12
Val de Santo Domingo (Dehesa Peroveque) Corazón de María 11
Talavera Prado 4.000
Casar de Escalona Hortum Sancho 95
Cazalegas Rosario 75
Cebolla Antigua 200
Domingo Pérez Inmaculada 40
Gamonal Purificación 42
Navalucillos Saleras 400
Navalmorales Inmaculada 200
Malpica de Tajo Nieves 62
Mesegar Inmaculada 55
Montearagón Rosario 75
Lucillos Milagrosa 50
Otero Inmaculada 50
San Bartolomé de las Abiertas Inmaculada 175
Tamajón Enebrales 100


BANDAS DE MUSICA

Mora
Madridejos
Villanueva de Bogas
El Romeral
Cobisa
Consuegra
Dosbarrios
Villarrubia de Santiago
Magán (2)
Guadamur
Ocaña
Méntrida
Talavera de la Reina
Turleque
Orgáz
Alcabón
Escalona
Torrijos
Fuensalida
La Mata
Asilo Provincial de Toledo
Academia de Infantería
Toledo


La Virgen del Rosario de Pastores en la plaza de Zocodover
a su paso junto al arco del Cristo de la Sangre.

En torno a cada Imagen se apiñaban los fieles y autoridades de los respectivos pueblos, presididos por sus Curas Párrocos. las gargantas atronaban los espacios con los cánticos y el rezo del Santo Rosario. Se traslucía en los romeros el cansancio de un penoso viaje desde tierras remotas de la Alcarria o de Albacete. Muchos aún no habían tenido tiempo de sacudirse el polvo de su dura peregrinación a pie. Muchos no habían tenido tiempo para comer aún.... Pero un halo de alegría le recamaba todo de amor y solemnidad religiosa. Se recorría el itinerario procesional con rapidez y donaire al mismo tiempo que con majestad y señorío castellano. Pasaban las Imágenes entre los aplausos de un inmenso gentío que llevaba la plaza del Ayuntamiento, después se las veía subir la cuesta del Arco de Palacio e internarse por las callejuelas estrechas Hombre de Palo y Comercio. En las encrucijadas, en los balcones y portales los fieles se apiñaban para contemplar la grandiosa manifestación de Fe mariana. A la llegada a Zocodover la riada procesional se remansaba en un pronunciado meandro que abrazaba la plaza; desde el balcón del Cristo de la Luz, el incansable locutor D. Jose María Mansilla a través de potentes altavoces saludaba el paso de la diversas invocaciones con palabras encendidas de entusiasmo. si fuéramos a describir los rasgos más sobresalientes de tipismo y colorido, o de rancio abolengo espiritual que desde aquella atalaya se divisaban al pasar el cortejo por Zocodover, nos veríamos precisados a escribir un libro, que no pecaría por falta de materia interesante. Imágenes de todos los estilos, de todos los tamaños, de atavíos los más diversos eran como una estela de estrellas marianas que nos dejaron nuestros gloriosos antepasados toledanos. Entre los pliegues de sus mantos iban aún las oraciones de generaciones pasadas... Y aquellos mantones y refajos y mantillas de las mozas.... y las capas, fajas y pantaloncillos de los hombres, y aquellos rosarios largos y sonoros de cuentas gordas.... y aquellos cetros florecidos de las antiguas hermandades.... las escoltas de soldados de Flandes o de guerreros enfundados en recias armaduras...  Todo era luz y color y vida.



Cinco horas y media duró el desfile religioso


En el apiñado peregrinar de nuestra Fe mariana se pasaban las horas sin sentir; ya hacía cuatro horas que la primera Imagen había llegado a la Vega y aún quedaban Imágenes en los cruceros de la Catedral Primada esperando su turno. En la Vega un equipo de locutores saludaban a las diversas advocaciones marianas que hacía su aparición, recordando a los peregrinos las maravillosas tradiciones marianas de cada pueblo, sus glorias y su acendrado amor a la Virgen. Así pasaba el tiempo sin sentir, esperando todos el momento ansiado en que hiciera su aparición la Virgen del Sagrario. Entre tanto la noche impaciente había acelerado su paso, y para sumarse a nuestro júbilo encendió la constelación de sus estrellas más refulgentes. Tal vez tenía envidia de la iluminación apoteosica que ceñía las sienes de las Imágenes a su paso por las calles Hombre de Palo y Comercio, de Toledo. Eran muchas las Imágenes iluminadas también con baterías, con tal arte que más parecían celestiales apariciones que obra de manos mortales.

Llegó por fin la hora de salir la Santísima Virgen del Sagrario; serían aproximadamente las ocho de la noche. El cortejo se cerraba con la Presidencia religiosa: El Rvdmo. Sr. Oblispo Auxiliar revestido de capa pluvial, mitra y báculo, asistido por dos Canónigos; y detrás, con la majestad de su dignísima púpura cardenalicia, el Sr. Cardenal Primado, de capa magna acompañado del Ilmo. Sr. Deán de la Catedral y el M. I. Sr. Canónigo Arcediano; después, las Jerarquías provinciales civiles y militares con sus más altos dignatarios, y cerrando el cortejo las autoridades, el Excmo. Ayuntamiento de Toledo en pleno con sus tradicionales maceros y la Excma. Diputación Provincial. En su recorrido, la Santísima Virgen del Sagrario iba vestida de su manto azul, con sus manos orantes, sin el Niño, recamada de joyas y ostentando la Medalla de Oro de la Ciudad de Toledo. Los vítores y aplausos a la Virgen no cesaron hasta que esta dio vistas a la Vega Alta donde sonó un estruendoso fragor de tempestad en Honor a María, como una salva de cañonazos salidos del corazón de toda la Archidiócesis. Pañuelos al aire, lágrimas en los ojos, jubilosos saludos.... Y entre ellos pasó la Santísima Virgen, precedida de otra Imagen de singular veneración en la comarca toledana, la Santísima Virgen de la Esperanza.

Excmo. Sr. Obispo Auxiliar Sr. Miranda revestido de Pontifical y los
canónigos La Fuente y Rivera





















La venerada imagen de Nuestra Señora del Sagrario pasó a ocupar el centro un magnífico dosel situado delante de la Casa del Corcho en la Vega Alta y detrás de la tribuna presidencial, de suerte que desde toda la Vega podía verse. El aspecto de la Vega era impresionante. Las Imágenes peregrinas formaban corona alrededor del amplio paseo central de Merchán, rodeadas de sus devotos hijos. Muchas Imágenes no pudieron colocarse en el periciclo del paseo y se habían situado entre la masa de fieles. Otras, las últimas en llegar, no pudieron entrar en el paseo de Merchán por no haber materialmente ni un pequeño hueco libre. Por eso se veían la carretera y los paseos laterales invadidos también por público y las Imágenes. Las primera autoridades de las provincias de Toledo y Guadalajara ocuparon la parte izquierda de la tribuna levantada. El Emmo. Sr. Cardenal Primado ocupó un sitial en el centro y a su derecha se situó el Excmo. Sr. Obispo Auxiliar de la Diócesis y el Excmo. Cabildo Primado. Delante de la tribuna presidencial dos hileras de sillones fueron ocupados por las Corporaciones del Excmo. Ayuntamiento y la Excma. Diputación de Toledo. Los Seminarios, el Mayor y el Menor de la Ciudad se situaron a ambos laterales de la tribuna presidencial. Se dio realizó una ofrenda por todas las Archidiócesis, concluyendo con la que realizó el Excmo. Sr. Gobernador Civil de la Provincia de Toledo, D. Andrés Marín, renovando la consagración de toda la Archidiócesis al Purísimo Corazón de María. Un silencio impresionante hizo más sonoro aún los altavoces, como si todos aquellos hijos de María se hubieran recogido en el interior de sus corazones para renovar conscientemente la consagración de sus personas, de sus familias y de sus pueblos al Corazón de María, por medio de la primera Autoridad Civil Toledana.  Evocaban así aquel 13 de Junio de 1943, domingo de Pentecostés, en que toda la Archidiócesis Primada se consagró al Inmaculado Corazón de María, uniéndose espiritualmente a la consagración de toda la Iglesia hecha por S. S. Pio XII unos meses antes.


Imposición de las medallas conmemorativas a la Imágenes Procesionales

Emmo. Sr. Cardenal Primado Pla y Deniel de capa magna, acompañado del
Deán y el Arcediano del Cabildo Primado con trajes de gala.






















A una indicación de los altavoces, todos los Párrocos impusieron a sus Imágenes una medalla conmemorativa, acuñada por la Junta Promotora y donativo de la misma, para perpetuar en la memoria de nuestros pueblos esta inefable fecha, en que no sólo los fieles fueron peregrinos, sino también las Imágenes de más veneración acompañadas de sus hijos por los polvorientos caminos de la Archidiócesis para dar solemnidad y esplendor a este homenaje y hacernos sentir con la evidencia de lo palpable, que todas las distintas advocaciones de nuestro abolengo espiritual mariano convergen en la veneración de una misma Señora, Nuestra Madre Celestial, la Virgen María. la medalla conmemorativa era redonda, de unos cinco centímetros de diámetro, con la inseripción:  "Procesión Diocesana Mariana.  1954".  Imagen peregrina.  Un cordón azul permitía colgar las medallas del cuelo de las Imágenes. Mientras los Párrocos imponían las medallas a sus Imágenes, las veinticuatro bandas de música tocaron al mismo tiempo y en perfecta armonía la Marcha Real. El momento fue de intensa emoción; espontáneamente el gentío prorrumpió en aplausos y vítores a la Virgen Inmaculada.  Pero se hizo un profundo silencio cuando el Emmo. Cardenal primado impartió su Bendición a los fieles allí congregados. Y los aplausos y vítores se repitieron, pues el entusiasmo había invadido a la multitud como resultado del fervor de todo el Año Mariano. Y el popular canto de la Salve unió en una misma plegaria a las 60.000 personas que pueden calcularse llenaban la Vega Alta y sus carreteras adyacentes. Sin duda que Nuestra Señora debió de sonreír desde el cielo a tanto amor, tanto entusiasmo y tanta unidad de esta Iglesia toledana congregada con su Pastor y unida en espíritu al Romano Pontífice, para ensalzar y vitorear a su Reina Inmaculada.
Medalla entregada a nuestra Patrona en
conmemoración de la peregrinación a Toledo


Una grandiosa traca colocada en los paseos que dan vista a la Vega Baja atronó los espacios con sus detonaciones. Fue costeada por el Excmo. Ayuntamiento de Toledo, que en todo momento supo ponerse incondicionalmente a disposición de la Junta Promotora, para la realización financiación de todos los actos.


Despedida de las Imágenes


Había llegado la hora triste de las despedidas. El M.I. Sr. D. Angel Moran Otero se encargó de recoger con su fervorosa palabra el ambiente de entusiasmo y de piedad mariana, recordando las gloriosas efemérides de la Archidiócesis toledana, las predilecciones de la Santísima Virgen para con Toledo y la pena de una despedida después de un día vivido en tan feliz unión.















Cruzó nuevamente la Santísima Virgen del Sagrario el mar enfervorecido de los fieles, esta vez camino de su camarín de la Catedral. Se desintegró aquella concentración llevando su explosión miles de fieles a todas las carreteras toledanas. La Santísima Virgen del Sagrario llegaba a su capilla de la Catedral cuando hacía un rato que habían sonado los once campanadas de la noche. Las demás Imágenes con sus devotos peregrinos tal vez tenían que recorrer aún centenares de kilómetros...  pero el entusiasmo religioso pudo más que en cansancio; por eso muchos peregrinos al llegar a sus respectivas Parroquias, tal vez a las tres de la madrugada del día siguiente, se bajaron de sus coches y tomaron sobre sus hombros la venerable Imagen entrando procesionalmente en el pueblo, contagiando así con su fervor a los paisanos que no habían podido asistir a la Procesión de Toledo.

Así terminó este día triunfal de María, dejando en nuestras almas un dulce recuerdo y una esperanza cierta de que nuestro pueblo ha de vivir con toda plenitud su catolicismo, porque lleva en su seno una semilla salvadora: La devoción tierna y honda a María Inmaculada.

Participación de la Hermandad de la Virgen del Rosario de los Pastores

La Hermandad de la Virgen del Rosario de los Pastores, a través del Párroco don Esteban Rojo, hizo un donativo a la Stma. Virgen del Sagrario de Toledo de 350 ptas.
Las camareras encargadas de vestir a la Virgen fueron Petra López, Irene Riopérez y Mariana Ledrado, que se trasladaron a Toledo para terminar de vestir a la Virgen.
Las personas que empujaron la carroza y guiaron la lanza de la carroza de la Virgen fueron Pedro Cuesta, Eugenio Pantoja, Pablo Vadillo y Aquilino Villafuertes.
Las flores que portó la Virgen sobre su carroza costaron 195 pesetas.

Algunas de las fotos utilizadas para este artículo son de la colección "AMT - Antonio Pareja".